LA CRONICA MORBIDA
21 SEP 2012
PUNTUALMENTE.
Puntualmente escribo este articulo para que
lo lean cada viernes, como puntualmente cada septiembre, con el inicio de
curso, ocurren hechos significativos que nos llenan de perplejidad, asombro,
conmoción y espanto. Esperanza Aguirre deja la vida publica, cansada de las
guerras internas, de la hipocresía y de la actitud meliflua en algunos
asuntos de su propio partido. España pierde una política de fuste, le duela a
quien le duela y su familia gana una gran mujer a tiempo completo. Santiago
Carrillo decide no fumar más en la tierra y se nos marcha un político clave de
la transición española dejándonos una incógnita histórica; si fue
verdaderamente ángel de la democracia o demonio genocida de Paracuellos. Puntualmente
nuestro arqueólogo concejal Pablo Rosser, tras pasar por el expectro de todas
las izquierdas posibles, vuelve a convertirse en un fósil político para la ciudad. No tiene suerte
este chico, no.. Puntualmente nos llega el mensaje independentista de Cataluña
para recordarnos que el estado de las autonomías es un fino alambre para el equilibrio
de este país con sus duplicidades, gastos, deudas, manías e inestabilidad
manifiesta. Puntualmente escucho a nuestro consell, el valenciano, con
paparruchadas varias, cuando en la actualidad si nos lanzan con un cañón, donde
caigamos debemos, vamos que estas boquitas de alelí “deben” hasta de callarse…
Miles y miles de euros que se deben a entidades de ámbito social abocadas
prácticamente a la desaparición…deuda sanitaria y farmacéutica
insostenible, deuda en educación…línea 2 del TRAM parada…ciudad de la
justicia…palacio de congresos…¿sigo? queridos consellers, y nosotros mientras
tanto, aquí seguiremos puntualmente, pagando facturas cada vez más abultadas y las
consecuencias de las gestiones desastrosas y nefastas de los cuatro
titirimundis de turno…en fin …que estoy seguro que de ésta salimos, lo
que no sé ya es si con los pies por delante... porque la vida nunca nos depara
lo que queremos en el momento apropiado. Las aventuras ocurren, pero a veces …
no puntualmente como quisiéramos.
Juan carlos Gumiel
gumiel@ono.com